- Con la mitad del aforo en Santander y severas restricciones en pequeños municipios, La Universidad Permanente logra mantener una actividad regular para 1.122 alumnas y alumnos.
- La acción cultural y las jornadas especializadas se han desarrollado gracias a la responsabilidad de equipo y participantes y a una fuerte inversión en medidas de prevención.
El curso 2020-2021 de UNATE, La Universidad Permanente, comenzó con incertidumbre pero concluye su primer trimestre con un balance de “normalidad” entre sus alumnas y alumnos y multitud de actividades de apoyo a las personas mayores que sufren la pandemia de forma doble porque “luchan contra los riesgos reales y contra la estigmatización social”. El coordinador de la entidad, Francisco Gómez Nadal, cree que el éxito de este trimestre tiene dos protagonistas: “Por un lado, las alumnas y alumnos de UNATE pertenecen al colectivo más responsable de la sociedad, el de las personas mayores, y cumplen con rigurosidad todas las indicaciones de seguridad. Por el otro, le debemos el curso al equipo de La Universidad Permanente y a los algo más de 70 colaboradores-docentes que han trabajado duro para garantizar el curso en este contexto de cierre de casi todos los espacios para las personas mayores”.
UNATE convocó el curso con una reducción de la ratio de sus aulas de entre el 50 y el 60%, con una inversión en equipos de prevención y seguridad que ya ronda los 25.000 euros y con una oferta adaptada a la crisis sanitaria que vivimos. “Ha sido complicado, pero sabíamos que es justo en este momento cuando las alumnas y alumnos mayores de 50 años necesitan más apoyo y más redes de socialización”, defiende Modesto Chato de los Bueys, presidente de UNATE.
En total, 1.122 personas han asistido de forma regular a actividades de aprendizaje en Santander y en otros municipios de la región (Santa Cruz de Bezana, Suances, San felices de Buelna, Los Corrales de Buelna, Laredo o Cabezón de la Sal) aunque al inicio de la segunda ola del Covid-19 muchos ayuntamientos decidieron cerrar sus instalaciones y eso ha limitado el desarrollo normal del curso en algunos puntos. Esta cantidad de alumnos supone una reducción del 60% respecto al curso 2019-2020, “pero hemos completado todos los cupos disponibles en todas nuestras actividades”, explica Gómez Nadal. “Cuando pusimos en la balanza los riesgos y los beneficios de mantener la actividad, aunque fuera con estas limitaciones, tuvimos claro que privar de la salud emocional y de los estímulos físicos e intelectuales de la actividad de UNATE era un castigo injusto y de graves consecuencias a futuro”.
Unas 500 personas han participado en otras actividades de La Universidad Permanente, como la Cátedra Casado Soto de Patrimonio e Historia de Cantabria, reabierta en octubre, las conferencias abiertas en municipios como Laredo o Cabezón de la Sal, la nueva programación cultural de pequeño formato en Espacio Perines o las II Jornadas Mujer y Envejecimiento, programadas en diciembre con un aforo muy limitado y en las que han participado de forma presencial 160 personas.
Además, en este trimestre, UNATE, en colaboración con la Fundación Patronato Europeo de Mayores (PEM), ha impulsado proyectos de apoyo a personas mayores en riesgo de soledad (Rasines), ha realizado el primer estudio sobre mujer mayor y soledad en Cantabria, y ha podido llevar a cabo una decena de rutas saludables en el exterior. “A pesar de las enormes dificultades operativas y financieras, creo que hemos estado a la altura de este momento crítico y hemos insistido ante las autoridades locales y regionales en la importancia de tener estrategias integrales para las personas mayores porque si algo ha dejado claro la crisis sanitaria es que hay demasiados prejuicios y vacíos cuando nos referimos a este colectivo, que, por cierto, supone el 22% de la población cántabra”, insiste Chato de los Bueys.
Durante el año 2020, además, UNATE ha incrementado de forma significativa su producción de contenidos digitales que, sin sustituir al aprendizaje presencial, complementan la acción de La Universidad Permanente. Desde el inicio del primer estado de alarma, en marzo, UNATE ha producido 50 vídeos y en el primer trimestre del curso 2020-2021 ha difundido dos series de impacto entre su público: Palabras Mayores, unas conversaciones en línea con expertas y expertos en derechos humanos de las personas mayores, y De paseo con Prudencia, una serie de ficción para impulsar una vida durante esta crisis sin miedo pero partiendo de la responsabilidad individual. En total, el canal de Youtube de UNATE suma en este periodo 12.600 visualizaciones y las transmisiones en directo han sumado a otros 2.600 usuarios.
También ha sido un inicio de curso intenso en cuanto a las relaciones institucionales y de incidencia. UNATE ha animado al Gobierno de Cantabria a recuperar el trabajo realizado hace unos años para que la región sea amigable con las personas mayores, ha participado en el diseño de la Agenda 2030 para Cantabria con el objetivo de que las personas mayores sean tenidas en cuenta en los planes para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y ha formado parte de las mesas de participación del Plan General de Urbanismo de Santander, entre otros espacios. Hemos firmado convenios de colaboración con los ayuntamiento de Santa Cruz de Bezana y Suances, se han cerrado acuerdos para iniciar actividades en 2021 en Puente Viesgo, Camargo y Torrelavega, y hemos sellado una alianza de colaboración con UGT Cantabria que se ha traducido en el uso de un edificio de aulas en la Calle Magallanes de Santander, destinado en parte al Área de Humanidades y Ciencias Sociales de UNATE, y en la colaboración en diversas áreas de actuación.