UNATE, La Universidad permanente es una de las entidades sin ánimo de lucro con mayor implantación territorial en Cantabria y, por eso, conoce bien los déficits que se van acumulando en los territorios rurales. Uno de los más evidentes —junto a problemas en el acceso a la salud o al transporte— es el de la cultura. También sabemos que, cuando la ciudadanía queda reducida a consumidora de cultura, se rompe el vínculo fundamental que puede re-producirla pero, además, supone que allá donde no es ‘rentable’ económicamente la cultura, esta no llegará. Es decir, que los territorios no urbanos van convirtiéndose o en espacios ‘vaciados’ de cultura o convertidos sólo en una escenografía para que ‘otros’ consuman cultura como experiencia y como entretenimiento. “Se aborda el escenario rural como una alteridad que la modernidad ha escenografiado por el capricho de personas y procesos que afloran al profundizar en la sociogénesis de sutiles dinámicas conformadoras de una vida cotidiana y una cultura rediseñada externamente para el consumo”, como explica Mª Alexia Sanz Hernández, en El consumo de la cultura rural (2007). Sanz nos plantea el dilema entre el “consumo cultural en los entornos rurales y [/o] lo rural como objeto de consumo en sí”.
Por eso, la acción cultural de UNATE en territorios rurales es especialmente intensa y, ahora, cuenta con el respaldo a lo realizado en los últimos dos años de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, a través de una convocatoria financiada con fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para ampliar y diversificar la oferta cultural en áreas no urbanas. Así lo ha notificado la Consejería al resolver la convocatoria de concurrencia competitiva a la que optó UNATE con “Cultura Mayor Rural”, un completo plan de intervención en 8 municipios de tres áreas geográficas y culturales de interés en Cantabria: Campoo-Los Valles (Arenas de Iguña, Campoo de Yuso y Valdeolea), Valles Pasiegos (Puente Viesgo y Villacarriedo) y Oriente-Alto Asón (Ramales de la Victoria, Laredo y Guriezo).
UNATE considera que la cultura supone una posibilidad de re-conexión y de democratización de los territorios, en la línea de lo planteado por Benito Burgos en el libro Pensar y hacer en el medio rural (2020): “en un medio rural afligido por la soledad y el aislamiento, la cultura es ese ‘momento’ que nos permite estar juntos y aferrarnos a los otros. Quizás no haya acto con mayor poder transformador, por simple que parezca, que ese ‘estar juntos’ para pensar y hacer en común”.
Cultura Mayor Rural se ha desarrollado, en su parte pública, de enero de 2022 a septiembre de 2023 e incluye una parte de evaluación y gestión final que extiende el proyecto hasta noviembre de este año 2023. En las actividades públicas han participado 1.167 personas mayores de 60 años de municipios.
Durante los casi dos años del proyecto se han programado talleres de creación y expresión artística, laboratorios de artes escénicas y teatro, formaciones en herramientas digitales, conferencias, conciertos, y tres encuentros masivos de personas mayores de ámbitos rurales entorno a la cultura en Ramales de la Victoria, Puente Viesgo, y Campoo de Yuso.
