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En 2007, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó conmemorar cada 15 de octubre el “Día Internacional de las Mujeres Rurales”, como “reconocimiento a la función y contribución decisivas de las mujeres rurales en las economías familiares y en el desarrollo de sus comunidades”.

Desde UNATE y PEM creemos que, si seguimos celebrando este día, es porque existen reivindicaciones importantes que tenemos que apoyar como entidades que participan en numerosos municipios rurales, de manera relevante con mujeres, y, especialmente, mayores.

Sabemos por nuestro conocimiento del territorio, que todavía a día de hoy en Cantabria las bajas tasas de empleo en las zonas rurales afectan en mayor medida a las mujeres, que además cobran salarios más bajos y ocupan puestos laborales de menor cualificación que los hombres y les resulta más difícil conciliar la vida personal, familiar y laboral, porque el trabajo doméstico y de cuidados sigue sin ser una responsabilidad asumida de manera general por los hombres, lo que obliga a las mujeres a desempeñar una doble jornada de trabajo fuera y dentro de casa.

Además, las mujeres en el medio rural tampoco tienen el mismo acceso a los recursos que los hombres en lo que respecta a la propiedad o el acceso a la toma de decisiones, por ejemplo, en nuestra región, sólo hay cuatro explotaciones ganaderas de titularidad compartida y en las corporaciones locales sólo participan 377 mujeres frente a 659 hombres.

Sin embargo, también sabemos que se han conseguido avances que debemos consolidar. Las mujeres en el medio rural tienen una importante movilización y, de manera destacada, las mujeres mayores, ya que participan en sus comunidades y se asocian más que los hombres, lo que promueve no sólo la mejora de su situación como mujeres, sino la del conjunto de sus pueblos y entornos. Desde UNATE-PEM apoyamos con todos los recursos humanos y materiales a nuestro alcance para que esta participación de las mujeres rurales sea activa, empoderada, sostenible y permita la relación entre todas las generaciones, creando comunidades rurales para todas las edades.

En este Día Internacional de la Mujer Rural desde UNATE-PEM seguimos reivindicando:

  • Visibilizar no sólo las dificultades a las que se enfrentan cada día las mujeres rurales, sino también poner en valor su elevada participación y su compromiso social.
  • Poner el foco en las mujeres mayores y las personas que habitan los ámbitos rurales, y no en aquellas que lo abandonan. La Cantabria que denominan como “vaciada” está llena de mujeres que, además de sostener la vida, preservan un ingente patrimonio inmaterial.
  • Aumentar y mejorar los recursos públicos para que los municipios rurales dispongan de lo necesario para el desarrollo de una vida digna y autónoma que evite su despoblamiento. Es vital que los recursos socio-sanitarios sean de cercanía y adaptados a las dinámicas territoriales y culturales de las personas.
  • Apoyar la creación y mejora de espacios comunitarios que contribuyan al empoderamiento de las mujeres rurales como mecanismo de cohesión y sostenibilidad del territorio.
  • Generar y dotar de recursos espacios de participación de las mujeres mayores con capacidad real de incidencia en todas las políticas públicas que tienen que ver con sus vidas.